Celebramos el Día Mundial del Reciclaje abordando la importancia de la valorización de los residuos en las empresas. Para ello, entrevistamos a Zila Muchari, jefa de Asuntos Ambientales de Disal, quien nos brinda un enfoque amplio de este tema y cómo desde nuestras operaciones brindamos este servicio a nuestros clientes de forma especializada.
La valorización es el nuevo término que se emplea para referirse a toda forma de aprovechamiento de los residuos o parte de estos, de manera que sirvan como sustitutos de otros materiales o recursos en los procesos productivos. Las formas de valorización más conocidas son el reciclaje y el compostaje.
Esta palabra nace en el 2017 con el Decreto Legislativo 1278 que aprobó la Ley de Gestión Integral de Residuos Sólidos, reglamentado por el Decreto Supremo 014-2017-MINAM, el cual busca principalmente que las empresas promuevan la gestión y manejo de los residuos sólidos priorizando la minimización, la valorización y finalmente, como última opción la disposición final.
Con la Ley de Gestión Integral de Residuos Sólidos se enfatiza el principio de responsabilidad extendida del productor con la cual se fomenta que las empresas de acuerdo a las actividades que realicen, participen activamente en las diferentes etapas del ciclo de vida del producto para lo cual podrán establecer medidas que involucren el uso eficiente de los materiales y ecodiseño de los bienes, la prevención de la generación de los residuos en sus actividades y la participación en el manejo de los residuos, priorizando su recuperación y valorización.
Asimismo, se establece el principio de la responsabilidad compartida el cual señala que la gestión de los residuos es una corresponsabilidad, es decir, involucra la participación conjunta, coordinada y diferenciada de los generadores (empresas, instituciones y ciudadanos), operadores de residuos y municipalidades.
Cabe señalar, que en el 2020 esta norma fue modificada por el Decreto Legislativo 1501, la que aún no ha sido reglamentada por lo que estamos a la espera de que se concrete pronto porque impulsará aún más la valorización de los residuos.
La importancia de la valorización de residuos radica principalmente en su contribución al cuidado del ambiente. Cada vez que una empresa apuesta por esta actividad está sumando esfuerzos para utilizar los recursos de manera sostenible y reducir su impacto ambiental, además está participando activamente en los compromisos asumidos por el país en el Acuerdo de París con el que se busca frenar el cambio climático.
Gracias a la valorización de residuos las empresas pueden lograr un triple impacto: Económico, ambiental y social. Desde el aspecto económico pueden reducir sus costos al minimizar la cantidad de residuos que se disponen en los rellenos sanitarios o de seguridad. Desde el eje ambiental, la valorización contribuye a disminuir el uso de materias primas y consumo de recursos naturales.
Y por último, desde el aspecto social genera puestos de trabajo, contribuye con distintas iniciativas que requieren la donación de residuos valorizables (papel, cartón, vidrio, plástico) para realizar contribuciones de carácter social o entregar los residuos a los programas municipales de recolección beneficiando a las asociaciones de recicladores formales que son parte de estos programas.
En la actualidad, debido a la infraestructura y la tecnología con la se cuenta en el país se pueden valorizar los residuos como papeles, cartones, tetrabrik, metales, residuos orgánicos, vidrios, plásticos, baterías, aceites, residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE), residuos de construcción y demolición, y envases de productos químicos.
En principio, toda empresa debe entender que al brindar un servicio o producto tiene una responsabilidad por la generación de residuos que ocasiona al producir, importar o comercializar. Por ello, es fundamental que incluya la valorización de sus residuos a lo largo de sus procesos productivos.
En este punto es muy importante que todos aprendamos a segregar o separar los residuos para almacenarlos en contenedores diferenciados, si la segregación en el lugar de generación no es correcta se reduce el total de residuos a valorizar y estos se pierden al ser dispuestos en un relleno. La segregación es clave en la valorización. Por otro lado, se requieren más plantas de valorización en el país, la mayoría está concentrada en Lima y eso provoca un incremento en los costos de transporte para aquellas empresas que se encuentran en otras regiones.
En Disal tenemos el propósito de “trabajar para un mundo más limpio y sostenible” y en esa línea, buscamos ayudar a nuestros clientes a priorizar la minimización y valorización de residuos, por ello brindamos un servicio integral en gestión y manejo de residuos sólidos y líquidos municipales y no municipales. El primer paso para brindar esta solución ambiental es la caracterización de residuos, con esta actividad podemos identificar la cantidad, tipo y composición física, logrando maximizar la valorización de los residuos.
Después de ello, procedemos con la valorización de los distintos residuos a través de nuestros aliados estratégicos, los cuales están especializados según el tipo de residuo. Para ello, en Disal verificamos previamente los permisos y autorizaciones de las plantas de valorización o industrias de consumo final y complementamos su evaluación con una visita técnica para asegurar que todo se realice en línea con el marco normativo y nuestros principios de gestión ambiental.